Jueves, 22 de febrero – Éxodo 13, 14 – Lectura adicional, Patriarcas y Profetas, capítulo 25, “El Éxodo”

1. ¿Cuál fue la razón para establecer la fiesta de los panes sin levadura? Éxodo 13:3-5

2. Cuando los hijos de Israel salieron de Egipto, ¿por qué camino los llevó Dios y por qué los guio de esa manera? Éxodo 13:17,18

3. Cuando los hijos de Israel vieron que faraón y su ejército estaban cerca, ¿qué hicieron? Éxodo 14:10-12

4. ¿Cuál fue la respuesta de Moisés? Éxodo 14:13-14

5. ¿Cómo se manifestó el poder de Dios? Éxodo 14:19-29

Dios liberó a su pueblo. Actuó milagrosamente en su favor. Qué momento tan emocionante debe haber sido ver tal manifestación del inexplicable poder y fuerza de Jehová. Doblegó al inflexible Faraón con las diez plagas. Finalmente cedió después de la muerte de los primogénitos en Egipto, desde el palacio del faraón hasta la casa más humilde. (Éxodo 12:29,30).

“Al rechazar la primera amonestación de Dios, el faraón de la antigüedad sembró las semillas de la obstinación, y cosechó obstinación. Dios no lo forzó a la incredulidad. La semilla de la incredulidad que él sembró produjo una cosecha según su especie. De aquí que continuara su resistencia, hasta que vio a su país devastado y contempló el cuerpo Cómo instruir y guardar a los hijos 53 frío de su primogénito y los primogénitos de todos los que estaban en su casa y de todas las familias de su reino, hasta que las aguas cubrieron sus caballos, sus carros y sus guerreros.” PVGM 63

En otras palabras, persistió en sus malas acciones sin arrepentirse, por lo que Dios se vio obligado a entregarlo al resultado de su obstinación. Y así fue que Faraón cayó de su pedestal.

Tenemos razón para alegrarnos hoy. Al final, todos los enemigos del pueblo de Dios serán vencidos. Así como Israel fue salvado de Egipto (Éxodo 14:30,31), aquellos que obedezcan el llamado de Dios y le busquen serán liberados de este mundo pecaminoso. Aquél por medio del cual Dios exhibió Su poder, Moisés, representa a Jesucristo, el Libertador de la humanidad (Juan 3:16,17). Jesús rompió las cadenas del pecado en el Calvario.
Pasa hoy tiempo de calidad con Jesús. Reflexiona sobre Su amor mostrado en la cruz. Observa cómo Su gracia protege y provee. Él salva a todos los que crean en Su nombre (Hechos 16:31). Tú también puedes ser liberado en tus momentos más oscuros.

Que el poder de Dios para liberar esté presente en tu vida.