


Lunes, julio 29 – Salmos 20, 65
1. ¿En qué día pide David que Jehová te escuche? Salmos 20:1
2. ¿Qué es mejor que confiar en la fuerza y los recursos humanos? Salmos 20:7
3. ¿De qué quiere ser saciado David? Salmos 65:4
Sobre el Salmo 20 dice el Comentario Bíblico Adventista,
“Los salmos 20 y 21, de tipo litúrgico, son afines. Sin duda el primero debía cantarse en favor del rey cuando él salía a la guerra, y el segundo, cuando regresaba victorioso. El Sal. 20 sugiere un arreglo antifonal para adecuarse al ritual del servicio. La congregación cantaba los vers. 1-5; el rey, o quizá un levita, entonaba los vers. 6-8; y el pueblo, el vers. 9. El sobrescrito que aparece en una versión siríaca dice que este salmo se escribió cuando David guerreó contra los sirios y los amonitas (2 Sam. 10).” CBA, Introducción al salmo 20
El salmo 20 es una bella oración. A menudo lo leo a los enfermos que visito, prácticamente lo puedo repetir de memoria. ¡Qué hermosas palabras! “Jehová te salve en el día de conflicto, te envíe ayuda desde el Santuario y desde Sion te defienda, traiga memoria de tus ofrendas y acepte tu holocausto.” “Selah”, hagamos una pausa para meditar en esto. Salmos 20:1-3
Los poderosos confían en sus armas y recursos, nosotros en el nombre de Jehová nuestro Dios tendremos memoria. Es mi oración que el Rey te oiga en el día que lo invoques en tu necesidad.
Sobre el Salmo 65 dice el Comentario Bíblico Adventista,
“EL Sal. 65 pareciera ser un glorioso himno de alabanza a Dios para celebrar la cosecha. Sus tres partes expresan alabanza a Dios por (1) sus cualidades morales (vers. 1-4), (2) su poder y majestad en la naturaleza (vers. 5-8) y (3) la abundante cosecha (vers. 9-13). La tercera sección es uno de los ejemplos más exquisitos de poesía que pueda encontrarse en los salmos sobre el tema de la naturaleza.” CBA, Introducción al salmo 65
David proclama la bendición de ir a la Casa de Dios,
“Bienaventurado el que tú escojas y atraigas a ti
para que habite en tus atrios.
Seremos saciados del bien de tu Casa,
de tu santo Templo.” Salmos 65:4
Hay una bendición que recibimos cuando vamos a la Casa de Dios, somos bienaventurados y somos saciados. ¿Quieres esta bendición? Si has quedado en tu casa después de la pandemia, te animo a regresar al templo. Serás bienaventurado y serás saciado. No es lo mismo participar en el servicio a la distancia que en la congregación de los santos. Qué bueno será encontrarte con Jehová en su Casa.
Los versículos 9–13 son una descripción poética de cómo Dios bendice y sustenta a su creación y de cómo la tierra responde en gratitud y alabanza. Que puedas deleitarte hoy al leerlos.
Que tú también seas abundantemente bendecido por el Creador en este día y que puedas responder en alabanza.