Martes, julio 9 – 1 Crónicas 12, Salmos 133 – Lectura adicional, Patriarcas y Profetas capítulo 69, “David llevado al trono”

1. ¿A quién inspiró el Espíritu Santo para confirmar el liderazgo de David? 1 Crónicas 12:18

2. ¿Cómo estaba el ánimo del pueblo cuando David fue reconocido como rey sobre todo Israel? 1 Crónicas 12:39, 40

3. ¿A dónde envía Jehová bendición? Salmos 133:3

1 Crónicas 12 es un capitulo marcial, dedicado a describir el primer ejército de David cuando fu coronado rey sobre todo Israel. Los primeros versículos están dedicados a los que se le unieron cuando aún estaba fugitivo y luego enumera los que se le unieron de todas las tribus, una vez que fue coronado. Eran hombres valientes, fuertes y diestros para la batalla. El versículo 22 los describe como “un gran ejército, como un ejército de Dios,” en una frase que denota orgullo nacional. probablemente refiriéndose a su número y apariencia.

David salió al encuentro con recelo de algunos que vinieron de la tribu de Benjamin y de Juda. Los benjaminitas eran paisanos de Saul, David quería estar seguro de sus intenciones. Sospechó también de los de Juda porque llegaron con ellos. En un gesto de valor él mismo salió a su encuentro. La integridad era valiosa para él, sufrió mucho más tarde en su vida cuando cometió graves pecado que fueron expuestos públicamente. En esta ocasión pudo decir delante de Dios que sus manos no estaban manchadas de sangre.
Cuando el proyecto es de Dios, Él ofrece confirmación por varios medios. Así fue como Amasias, un guerrero prestigioso, jefe de un grupo de valientes, fue usado por el Espíritu Santo para endosar la gestión de David como rey escogido por Jehová. Bajo inspiración Amasias exclamó, “¡Somos tuyos, David! ¡Estamos contigo, hijo de Isaí! ¡Paz, paz para ti, y paz para quienes te ayudan, pues también tu Dios te ayuda!” 1 Crónicas 12:18.

No apoyemos ningún líder o movimiento sin la aprobación explicita de Jehová y sin la confirmación clara del Espíritu Santo. David tuvo el apoyo de Samuel, respetó a Saul como ungido de Jehová, dio evidencia de su llamado por sus acciones, la bendición fue evidente sobre él en sus campañas. Ahora el Espíritu Santo lo confirma a través de Amasias. La línea de dirección divina era trazable, evidente y clara. No debemos procurar menos cuando se trate de nuestro apoyo a un líder o movimiento.

El Salmo 133 celebra la reunión de los hermanos en armonía bajo la dirección y bendición de Jehová. Es bueno y es delicioso, “mirad” es una invitación a probarlo. Perdemos esta delicia y bondad cuando escogemos no congregarnos con el pueblo. El óleo o aceite sagrado que se usó para ungir a Aaron era perfumado y santo. Cuando ungieron a Aaron como Sumo Sacerdote, el aceite fragante goteó sobre su barba y sus vestiduras. Aaron representa el orden religioso puesto por Dios para su pueblo. Debemos congregarnos bajo el liderazgo escogido y ungido por Él.

“¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es que habiten los hermanos juntos en armonía!”
Es mi oración que busques siempre la dirección de Dios para tu fe y para tu vida.