


Jueves, marzo 20 – Esdras 4, 5
1. ¿Qué pedido hicieron los enemigos de Judá a los líderes del pueblo? (Esdras 4:1, 2)
2. ¿Cuál fue la respuesta de los tales? (Esdras 4:3)
3. ¿Cuál fue entonces el recurso usado por esos enemigos? (Esdras 4:4, 5)
4. ¿A quién enviaron esos enemigos carta contra los judíos? (Esdras 4:8-17)
5. ¿Cuál fue el resultado de esa carta enviada? (Esdras 4:23, 24)
6. ¿Qué respuesta dieron los ancianos a la pregunta, “quién os dio orden para edificar esta casa”? (Esdras 5:11)
¡Bien! Ya dejamos atrás uno de los más fascinantes libros del Antiguo Testamento, Daniel, y continuamos adelante en nuestro viaje virtual a través del libro sagrado. Hemos continuado a la etapa final, lo que tiene que ver con el post exilio. Para ello, hemos retrocedido en el orden en que los libros del Antiguo Testamento fueron colocados en el Canon. Debe tenerse en cuenta que los libros del Antiguo Testamento están ordenados por temas y no por orden cronológico. Es por eso que vamos atrás a Esdras para seguir adelante en el tiempo.
Ya bajo el reino Medo-Persa, Dios obró para que un decreto hiciera que los judíos regresaran a Jerusalén y pudieran reedificar la ciudad y el templo.
Este “Artajerjes” que se menciona aquí no es el otro Artajerjes que dio el final decreto (457 a. C.) para que los judíos pudieran levantar el templo y la ciudad. Este es identificado como Cambises, o “el Falso Esmerdis” que reinó aproximadamente medio año (522 a. C.). Luego vino a reinar Darío que gobernó del 522 al 486 a. C.
Debe tenerse en cuenta que hubo tres decretos para reconstruir a Jerusalén:
1. Decreto de Ciro, en el 537 a. C.
2. Decreto de Darío, en el 519 a. C.
3. Decreto de Artajerjes Longímano, en el 457 a.C.
Antes de Darío, fue que subió al trono Cambises (el falso Esmerdis) enemigo de los judíos, quien suspendió la obra. Pero Dios siempre actúa a favor de su pueblo por medio de dos decretos más. Para comprender la profecía de las 70 semanas de Daniel, capítulo 9, escogemos el último decreto, porque fue el efectivo, el que dio al fin los resultados. Pero hay algo más importante. Partiendo del 457 a.C. con el decreto de Artajerjes Longímano, las fechas del bautizo de Cristo, así como su crucifixión, caen perfectamente.
Por último, Esdras 5 nos presenta el ánimo que los profetas Hageo y Zacarías le dieron a los líderes Zorobabel y Jesúa para que iniciaran la construcción del templo. Siempre Dios levanta la Palabra Profética para infundir ánimo cuando las fuerzas decaen. ¡Alabado sea el Señor! Esto también ocurre hoy.
Los enemigos del pueblo de Dios, Tatnai y Setar-bosnai no pudieron detener a los judíos a pesar de sus ardides.
Hoy, al final de la historia, tenemos nosotros una gran obra que hacer. No faltarán enemigos que tratarán de impedirlo, pero nosotros vamos adelante en el Nombre de Jehová de los ejércitos. ¡Cuánto aprendemos de la historia pasada que podemos aplicar a nuestro presente!
Les deseo bendiciones abundantes mientras nos inclinamos en reverente estudio ante el sagrado Libro de Dios.