


Martes, noviembre 26 – Miqueas 6, 7 – Lectura adicional, Profetas y Reyes, capítulo 27, “Acaz”
1. ¿Cómo puedes aplicar la justicia en tu vida cotidiana? Proverbios 21:3, Isaías 1:17, Mateo 23:23. Santiago 2:1-4
Piensa en situaciones donde puedes actuar con integridad, equidad o defender a quienes son tratados injustamente.
2. ¿Qué significa para ti “amar la misericordia” y cómo puedes mostrarla hacia personas difíciles en tu vida? Lucas 6:36, Mateo 5:7, Efesios 4:32. Romanos 12:20
Reflexiona sobre cómo perdonar y ayudar incluso a quienes no lo merecen o a quienes te han lastimado.
3. ¿De qué maneras puedes caminar humildemente con Dios en medio de una cultura que exalta el orgullo y el egoísmo? Proverbios 3:5,6, Miqueas 6:8. Filipenses 2:3-5. Santiago 4:6-7
Considera qué cambios podrías hacer para depender más de Dios y menos de tus propias fuerzas
Comentario y reflexión:
“Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno. ¿Y qué pide Jehová de ti? Solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.” Miqueas 6:8
El libro de Miqueas fue escrito en un tiempo en que Israel estaba sumergido en la injusticia social, idolatría y corrupción. A través de Miqueas, Dios hace un llamado a su pueblo para volver a lo esencial de la fe. En este versículo, el profeta resume la voluntad de Dios en tres principios claros: justicia, misericordia y humildad. Esta palabra sigue vigente hoy, pues en un mundo lleno de desigualdad, egoísmo y orgullo, Dios nos sigue llamando a vivir conforme a estos valores.
La justicia, según la Biblia, no es simplemente castigar a los culpables sino tratar a los demás con equidad y rectitud. Dios desea que su pueblo refleje su carácter justo en todas sus relaciones.
Hacer justicia no es algo que podamos delegar solo al gobierno o las instituciones. Cada uno de nosotros debe ser justo en sus decisiones diarias, ya sea en el trabajo, en la familia o en la comunidad. Defender a los oprimidos, ser honesto en nuestras transacciones y no participar en prácticas corruptas.
¿Hay alguna área en la que necesitas ajustar tu comportamiento para ser más justo?
La misericordia va más allá de la justicia; es un amor compasivo y un deseo de ayudar al necesitado. Dios no solo quiere que actuemos con justicia, sino que nuestros corazones se llenen de compasión hacia los demás. Amar la misericordia implica aprender a perdonar, dar sin esperar nada a cambio y mostrar bondad hacia los demás, incluso cuando no lo merecen. Ofrecer ayuda a alguien en necesidad, ser paciente con los errores ajenos y buscar reconciliación en vez de venganza.
¿Cómo puedes mostrar misericordia esta semana en una situación concreta?
Humillarse ante Dios implica reconocer nuestra dependencia total de Él, sometiéndonos a su voluntad en lugar de buscar nuestra propia gloria. La humildad es clave para vivir en comunión con Dios. Humillarnos ante Dios significa orar con un corazón sincero, obedecer sus mandamientos y vivir con gratitud, reconociendo que todo lo que somos y tenemos proviene de Él. Renunciar al orgullo, pedir perdón a Dios y a los demás, y servir sin buscar reconocimiento.
¿Hay áreas en tu vida donde necesitas rendir tu voluntad a Dios?
Miqueas 6:8 es un recordatorio claro y profundo de lo que Dios espera de su pueblo: hacer justicia, amar misericordia y caminar humildemente con Él. Estas tres actitudes transforman no solo nuestra relación con Dios, sino también con los demás. Vivir de esta manera es reflejar el carácter de Cristo y cumplir con el propósito de Dios para nuestras vidas.
Hoy es un buen momento para evaluar nuestras vidas. ¿Estamos practicando la justicia? ¿Mostramos misericordia? ¿Nos humillamos diariamente ante Dios? Pidamos al Señor que nos transforme para vivir según su voluntad y ser un reflejo de su amor en este mundo.
Mi oración hoy es: Señor, ayúdanos a vivir conforme a tu palabra. Enséñanos a ser justos, a amar la misericordia y a caminar humildemente contigo todos los días de nuestras vidas. En el nombre de Jesús, amén.