Miércoles, junio 4 – Hechos 12, 13 – Lectura adicional, Los Hechos de los Apóstoles, capítulos 16 y 17

1. ¿Por qué el ángel hirió a Herodes? Hechos 12:23

2. ¿Qué dijo el Espíritu Santo en relación con Bernabé y Pablo? Hechos 13:2

3. ¿Qué personaje importante se opuso a la predicación de Bernabé y Saulo en Chipre? Hechos 13:6

Hechos 12 relata una historia fascinante. Desde mis días felices en el departamento de los niños de la Escuela Sabática he sido cautivado por la belleza y las preciosas lecciones de la historia de la liberación de Pedro de la cárcel; pero la fascinante historia usualmente nos distrae del contraste que se presenta en el capítulo. En el mismo tiempo de la liberación milagrosa de Pedro, Jacobo, el hijo de Zebedeo y Salomé, una de las mujeres discípulas de Jesús, el hermano de Juan y uno de los primeros discípulos de Jesús, fue ejecutado a espada por el rey Herodes.

Este Herodes era un político inescrupuloso, como es evidente en la historia.

“Profesaba ser prosélito de la fe judaica, y aparentaba mucho celo por seguir las ceremonias de la ley judaica. Deseoso de obtener el favor de los judíos, y con la esperanza de asegurarse así sus cargos y honores, procedió a llevar a cabo los deseos de ellos persiguiendo a la iglesia de Cristo, despojando de casas y bienes a los creyentes, y encarcelando a los principales miembros de la iglesia. Encarceló a Jacobo, hermano de Juan, y mandó al verdugo matarlo a espada, como otro Herodes lo había hecho con el profeta Juan. Viendo que tales esfuerzos agradaban a los judíos, encarceló también a Pedro.” HAp 116

“Según la cronología que se conoce de los Hechos, Jacobo desempeñó un corto ministerio de sólo 13 años después de la ascensión de Cristo. Fue el primero de los apóstoles en morir, mientras que Juan, su hermano, fue probablemente el último en fallecer.” CBA, Hechos 12:2

“La muerte de Jacobo causó gran pesar y consternación entre los creyentes. Cuando Pedro también fue encarcelado, toda la iglesia se puso a orar y ayunar.” HAp 117

Es increíble que en esta situación Pedro estuviera durmiendo. El versículo 5 es poderoso, “Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel, pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él.” 12:5

“Mientras que por diversos pretextos la ejecución de Pedro fue postergada hasta después de la Pascua, los miembros de la iglesia tuvieron tiempo para examinar profundamente sus corazones y orar con fervor. Oraban sin cesar por Pedro; porque les parecía que la causa no podría pasarlo sin él. Se daban cuenta de que habían llegado a un punto en que sin la ayuda especial de Dios, la iglesia de Cristo sería destruida.” HAp 118

Por qué Pedro fue liberado en forma milagrosa y Jacobo fue dejado a que lo ejecutaran vilmente sólo después de 13 años de ministerio, es algo que debemos confiar a la providencia divina. Ahora no entendemos, lo entenderemos después. De todas maneras, Pedro fue dejado para que ministrara sólo unos años más. Alrededor de 25 años más tarde a él también le tocó seguir al Maestro y a Jacobo en el martirio, cuando fue crucificado en Roma. Dice la historia extrabíblica que cuando lo fueron a crucificar, pidió que lo pusieran cabeza abajo diciendo, “no soy digno de morir como el Maestro”. Unos días antes de su ascensión Jesús le había dicho:

“De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías e ibas a donde querías; pero cuando ya seas viejo, extenderás tus manos y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras. Esto dijo dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme.” Juan 21:18,19

En cuanto a Herodes, murió herido por un ángel en el momento del clímax de su influencia política. En un momento con el que sueña todo político, cuando la gente lo aclamaba en respuesta a su discurso diciendo, “¡Voz de un dios, y no de un hombre!”, “Al momento, un ángel del Señor lo hirió, por cuanto no dio la gloria a Dios; y expiró comido de gusanos.” 12:23

Creo que es importante mencionar lo siguiente. La unión de la iglesia y el estado ha sido y, de acuerdo con la profecía, será usada por el enemigo para corromper la iglesia y para perseguir al pueblo de Dios. La religión y la política no se mezclan. Por esa razón los adventistas somos fuertes proponentes de la separación de la iglesia y del estado. Separación de la iglesia y del estado significa la separación de la iglesia y la política y la separación de la política y del cristiano. Podemos tener opiniones y aun ejercer nuestro derecho al voto; pero debemos mantenernos como iglesia y como seguidores de Jesús, alejados de la política.

Dijo el Maestro: “Respondió Jesús: Mi Reino no es de este mundo; si mi Reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi Reino no es de aquí.” Juan 18:36

Si el reino de Jesús fuera de aquí, entonces sus seguidores pelearíamos políticamente por defenderlo, pero su reino no es de aquí.

Es mi deseo y oración que nosotros también estemos como los creyentes de Antioquia de Pisidia, llenos de gozo y el Espíritu Santo.

Dios nos conceda un día muy bendecido.