Martes, marzo 25 – Zacarías 5, 6

1. ¿Qué vio Zacarías volando? (Zacarías 5:1)

2. ¿Dónde estaba sentada la mujer? (Zacarías 5:7)

3. ¿Cuántos carros se mencionan en la visión de Zacarías? (Zacarías 6:1)

Al leer las profecías, pueden parecer difíciles de entender debido a todas las figuras extrañas que contienen. Algunas de ellas podrían ser verdaderas inspiraciones para películas de ciencia ficción y permanecer en nuestra mente como extrañas pesadillas. Sin embargo, muchas de estas profecías fueron importantes para demostrar cómo Dios cumplió sus promesas a Su pueblo y cómo las predicciones del Mesías se cumplieron exactamente como fueron anunciadas.

Esto confirma que lo que Dios reveló a Sus profetas era verdadero y que Jesús es el Hijo de Dios. También afirma nuestra confianza en Su Segunda Venida, asegurándonos que el mal y el horror que vemos hoy no durarán para siempre.

A continuación, algunas aplicaciones de los mensajes de esta lectura relevantes para nuestra vida hoy.

En Zacarías 5, el pergamino volador nos recuerda que Dios ve todas las acciones y que juzgará la deshonestidad y la falsedad.

“La ley de Dios condena a todo aquel que práctica la maldad. Esta puede desatender su voz, tratar de acallar su advertencia, pero es en vano. A todas partes lo sigue. Se hace oír. Perturba su paz. Si no le presta atención, lo persigue hasta el sepulcro. Da testimonio contra él en el juicio. Como fuego inextinguible, consume al fin el alma y el cuerpo.” La
Educación 129.

Esto nos motiva a vivir con integridad y veracidad.

La mujer en el efa representa el pecado, mostrando que debe ser eliminado de nuestras vidas. Dios desea la pureza en Su pueblo y finalmente eliminará la maldad del mundo.

¿Hay áreas en tu vida donde necesitas ser más honesto o apartarte del pecado? Dios nos llama a vivir en justicia y a confiar en Él para purificar nuestros corazones.

En Zacarías 6, los cuatro carros representan el poder de Dios sobre las naciones, recordándonos que Él está en control, incluso cuando el mundo parece caótico.

La coronación de Josué, el sacerdote, es un anuncio del Mesías, Jesucristo, quien es tanto Rey como Sacerdote y quien trae justicia, paz y salvación.

“Cristo intercedió ante el Padre en favor del pecador, mientras la hueste celestial esperaba los resultados con tan intenso interés que la palabra no puede expresarlo. Mucho tiempo duró aquella misteriosa conversación, el “consejo de paz” (Zacarías 6:13) en favor del hombre caído. El plan de la salvación había sido concebido antes de la creación del mundo; pues Cristo es “el Cordero, el cual fue muerto desde el principio del mundo”. Apocalipsis 13:8. Sin embargo, fue una lucha, aun para el mismo Rey del universo, entregar a su Hijo a la muerte por la raza culpable. Pero, “de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna”. Juan 3:16. ¡Oh, el misterio de la redención! ¡El amor de Dios hacia un mundo que no lo amaba! ¿Quién puede comprender la profundidad de ese amor “que excede a todo conocimiento”? A través de los siglos sin fin, las mentes inmortales, tratando de entender el misterio de ese incomprensible amor, se maravillarán y adorarán a Dios.”

Historia de los Patriarcas y Profetas, E.G. White, p. 44.

¿Confías en que Dios tiene el control de tus circunstancias? Jesús, nuestro Rey y Sacerdote Supremo, nos invita a seguirlo y a experimentar Su paz.

Que estos mensajes traigan frescura y renovación a tu vida hoy.