


Sábado, marzo 1 – Ezequiel 28, 29 – Lectura adicional, El Deseado de Todas las Gentes, Páginas 21, 22, 758, 759 y 764.
1. Los estudiosos creen que probablemente Itobaal III (ca. 591–573 a.C.) fue el gobernante terrenal más probable de Tiro mencionado en Ezequiel 28. El rey de Tiro era conocido por su sabiduría y orgullo, entre otras cosas. Dios juzga a este gobernante como soberbio, sentenciándolo a muerte y arrojándolo a un foso. ¿Cómo pudo el “orgullo” haber engañado a un rey tan sabio? ¿Alguna vez tu orgullo te ha desviado del camino? ¿Cómo podemos evitar que el orgullo nos domine?
2. ¿Qué similitudes y/o diferencias ves entre el rey de Tiro en Ezequiel 28 y el faraón, rey de Egipto, en Ezequiel 29?
3. ¿Qué lección se le dio a Israel, según Ezequiel 29:16? ¿Cómo puede ser esta una lección para nosotros hoy?
¿Has oído hablar del término “profecía dual”? Así se le llama a Ezequiel 28 debido a su doble significado en el texto. Ezequiel 28 funciona en dos niveles. (1) La profecía contra el rey de Tiro (Ezequiel 28:1-10) es un juicio literal e histórico contra el gobernante humano orgulloso de Tiro. (2) La lamentación sobre la caída del “querubín” (Ezequiel 28:11-19), que, aunque originalmente se dirige metafóricamente al rey, también se refiere a la caída de Satanás, simbolizando las implicaciones espirituales más profundas del orgullo.
Ezequiel 28 se dirige al rey de Tiro, condenando su orgullo (Ezequiel 28:2, 5) y su auto-deificación (Ezequiel 28:2, 5, 6, 9), y prediciendo la destrucción de Tiro y de su gobernante (Ezequiel 28:8-10). Sin embargo, en un nivel espiritual más profundo, cambia a un lenguaje profético que se refiere a la caída de Satanás (Ezequiel 28:11-19). Esta sección describe el peligro del orgullo en un sentido más amplio y cósmico, ilustrando la caída de este “querubín” y su rebelión contra Dios. Ezequiel 28 da una advertencia contra el orgullo y la auto-exaltación que trasciende a los gobernantes terrenales para abarcar una realidad espiritual mayor.
El gran cocodrilo del Nilo – En Ezequiel 29:3, el faraón es comparado con un “gran monstruo que yace en medio de sus ríos”. Es probable que esta referencia sea a un cocodrilo del Nilo, simbolizando la arrogancia y autosuficiencia de Egipto. La dependencia de Egipto en su propio poder y riqueza, en lugar de confiar en Dios, lo llevaría a su caída. Dios declara que Egipto sería derrotado y quedaría desolado durante cuarenta años (Ezequiel 29:11), sin gobernante, y su pueblo sería esparcido. Después de cuarenta años, Egipto sería restaurado, pero nunca volvería a ser tan poderoso como antes.
Ezequiel 29:15 dice: “En comparación con los otros reinos, será el más bajo; nunca más se alzará sobre las naciones, porque yo lo disminuiré para que no se enseñoree más de ellas.” (¡Esta profecía sigue siendo cierta hoy en día!) A medida que avanza el capítulo 29 de Ezequiel, vemos cómo Dios permitió que el rey Nabucodonosor de Babilonia cumpliera los juicios profetizados sobre Tiro y Egipto. Ezequiel 29 nos enseña los peligros del orgullo y la autosuficiencia. Además, vemos la soberanía de Dios y su control absoluto sobre los destinos de las naciones.
¿Cómo estás hoy? ¿Estás luchando con el orgullo, la arrogancia o la autosuficiencia? (seamos honestos). ¿Has puesto tu confianza total en el Señor? ¿Te has rendido completamente a Dios? ¿Hay alguien en una posición de liderazgo en tu vida con quien estás luchando? ¿Hay un “faraón” o un “rey” que te causa enojo o temor? ¿Elegirás hoy confiar en Dios con todas tus preocupaciones?
Mi oración hoy: Que podamos “humillarnos delante de Dios” (Santiago 4:10). Que podamos confiar en su Palabra. “Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo.” (Salmo 55:22). Gracias, Padre celestial, por tu amor, paciencia, misericordia, gracia, protección, guía, sabiduría y paz. Amén.